Cinco paisajes sónicos con voces artificiales

Escrito por: Salvador Jiménez Figueroa
Escrito por: Salvador Jiménez Figueroa

A pesar de ser un tema poco común, si has buscado música japonesa en YouTube o ido a una convención de anime, lo más probable es que hayas escuchado de Hatsune Miku. Unas de las canciones más famosas cantadas por ella son Ievan Polkka, World is Mine y Senbonzakura

Este personaje es una cantante virtual que cualquiera puede usar para hacer música. En este sentido es una especie de instrumento, una forma de crear melodías vocales en una canción a pesar de no saber cantar ni conocer cantantes humanos. Además de Miku existen decenas, si no es que cientos, de cantantes virtuales de diferentes orígenes; cada uno con su particular timbre y rango de voz. 

Usar vocaloids en la música puede ser una elección de estilo completamente. En el presente existen bancos de voz muy realistas, pero la mayoría todavía tiene un carácter claramente artificial, también único de cada banco de voz. Además de las características particulares de cada voz sintetizada que las distinguen de cualquier otra, sus usuarios emplean un sinfín de técnicas para que las voces suenen únicas y propias de su estilo particular. En este artículo quiero compartir 5 artistas únicos que han utilizado vocaloid en su música, algunos acercándose al realismo de una voz humana y otros abrazando y explorando la naturaleza artificial de les cantantes virtuales.

  1. whoo

La música de whoo está llena de percusión orgánica, guitarras acústicas, órganos y otros instrumentos de viento que acompañan guitarras eléctricas y crean una atmósfera densa y espaciosa, al estilo del shoegaze. El contraste de la voz sintética y compleja de Miku que flota en armonía con los elementos acústicos de una canción es uno de los aspectos más placenteros de escuchar música con cantantes virtuales.

2. seeeeecun (しーくん)

La música de productores de Vocaloid suele tener una estructura bastante estándar, como la mayoría del j-pop. seeeeecun logra crear canciones únicas con esta estructura explorando sonidos disonantes, o melodías no diatónicas (con notas que no contienen los acordes), resultando en una experiencia algo extraña la primera vez que se escuchan. Sin embargo, ya que es inevitable el deseo de escucharlas nuevamente, al repetirlas terminan volviéndose increíblemente adictivas. Sus sonidos contienen sensaciones difíciles de encontrar en la mayoría de la música popular.

 3. yuxuki waga

Logrando un sonido increíblemente realista con Hatsune Miku, con guitarras eléctricas limpias, dulces y transparentes, yuxuki waga crea canciones perfectas para imaginar amplios paisajes llenos de sol y brisa, o disfrutar una buena mañana. Dicho esto, su música también tiene un sentimiento de nostalgia que la hace difícil de escuchar sin sentirse vulnerable. Pero esto también es parte de su belleza. 

4. nakanoise

El shoegaze es un género especial porque se enfoca en crear paisajes sónicos a través de la distorsión y manipulación general de los sonidos; pero a diferencia del metal o el noise, los artistas de shoegaze se dan la tarea de crear canciones de pop con estos paisajes. Nakanoise domina la estructura del j-pop con timbres y patrones de batería llenos de energía y que son todo un placer escuchar. Su álbum Nagaremono No Gi (ナガレモノノ義) es una colección de shoegaze con vocales de Hatsune Miku que te adentra en un mundo íntimo, algo oscuro, donde todas las siluetas van perdiendo poco a poco su contorno si te pierdes de vista a ti mismo.

5. Iyowa

La belleza de la tecnología actual permite a cualquier persona hacer casi cualquier cosa que se proponga, y esto ha llevado al nacimiento de arte que no sería posible con las barreras (a veces físicas, a veces imaginarias) del pasado. Iyowa llena sus canciones de elementos misteriosos, atrevidos y a veces increíblemente agresivos que nunca había escuchado en una canción con el atrevimiento de tener una estructura de pop. En este caso quise compartir mi canción favorita de Iyowa que resume perfectamente todas sus fortalezas, Clover Knight. En esta pieza las voces de Hatsune Miku, Kaai Yuki y GUMI (todas cantantes virtuales) trabajan en conjunto para provocar un nuevo sonido con el que, a la par del hermoso caos de los instrumentos, es fácil obsesionarse por semanas. Aún después de escucharla repetidas veces, te dejará con la sensación de que no la has descifrado completamente no importa cuánta de tu atención robe cada que suena.